CIUDAD DE MÉXICO, 9 de junio.- Uno de los recuerdos que los adultos más conservan en su memoria es la experiencia de sus primeros conciertos y la noche del sábado la banda británica One Direction se convirtió en uno de esos momentos en la vida de más de 55 mil personas que se dieron cita en el Foro Sol.
Con un video en el que las fotografías de Liam, Harry, Niall, Louis y Zayn fueron apareciendo, la locura juvenil se desató en el recinto en el primero de los dos concierto que la banda ofrece en la Ciudad de México como parte de la gira Take Me Home Tour 2013.
En punto de las 20:40 horas el escenario se encendió simulando un castillo que cambiaba de tonalidades al ritmo de Up All Night y los gritos de las más de 55 mil almas se fundieron en un imponente coro.
“¡Ciudad de México!, queremos agradecer a todos los que se encuentran aquí esta noche. Este es por mucho el mayor concierto que hemos tenido”, lanzó Louis a sus enardecidas seguidoras que cimbraban las estructuras de Foro Sol con sus saltos, mientras cantaban I Would.
El Foro vivía una de sus noches más vibrantes gracias a la entrega de los británicos que hacían gala de su arsenal musical con otros temas como Heart Attack y More Than This.
“Su apoyo ha sido increíble, espero que les guste”, decía Liam después de que Niall agradeciera al público por su asistencia y levantara una bandera mexicana que le fue arrojada por las fans que se encontraban en las primeras filas del lugar.
Una gigantesca pantalla LED abarcaba todo el fondo del escenario y en ella se proyectaban gráficos e imágenes que, con figuras geométricas, simulaban estructuras.
La iluminación, con un diseño basado en las tonalidades rojas y blancas, servían para crear la atmósfera ideal para que la banda cantara Loved You First.
“¡Viva México!”, lanzó Harry, quien agradecía a su gente para que después Zyan asegurara que ahí estaban las mejores fans del mundo.
“Muchísimas gracias, son los mejores fans del mundo, por eso queremos oírlos cantar esta noche”, pidió el británico antes de que se escucharan los primeros acordes de One Thing.
Durante de una breve pausa, con el escenario a oscuras, las pantallas laterales proyectaban imágenes del backstage con los cantantes en sus camerinos, listos para volver con un nuevo vestuario.
Mientras la pantalla del escenario simulaba una ciudad de grandes edificios, el público iluminaba la noche con la luz de sus teléfonos celulares al tiempo que se escuchaba Change My Mind, una de las más ovacionadas.
“Esto realmente es exagerado: no logro ver cuánta gente hay”, dijo Liam minutos antes de evocar el pasado con el cover de One Way or Another, que popularizara Blondie en 1979.
Para mantener el ánimo encendido One Direction ejecutó Teenage Kicks mientras recorrían la pasarela que atravesaba la primera zona de la pista para acercase a la gente.
A manera de descanso, los jóvenes artistas leyeron algunos tweets de sus fans mexicanas y, emocionados, contestaron a uno que les preguntaba por su comida mexicana favorita: los tacos.
Temas como Last First Kiss, Moments, Back For You y Summer Love se incluyeron en el concierto así como
Little ThingsRock Me y She’s Not Afraid elegidos para el tramo final del recital que llegó con Kiss You.
Los gritos los trajeron de vuelta para cantar Live While We’re Young y What Makes You Beautiful y con ellas dijeran adiós.
Enloquecen a sus fans
No importó el tiempo de espera o las inclemencias del clima. El objetivo era claro y, al lograrlo, cientos de adolescentes enloquecieron.
Habían cumplido su sueño y con ello habían logrado que en su ecuación las diez horas de espera valieran la pena al obtener un saludo de algunos de los integrantes de One Direction.
Afuera del hotel Four
Seasons, ubicado sobre
Paseo de la Reforma, las seguidoras de la agrupación británica invertían su tiempo con diversas actividades. Cantaban Cielito lindo, El mariachi loco y La cucaracha y gritaban frenéticamente por cualquier movimiento que surgía del inmueble.
La expectativa era grande hasta que finalmente, alrededor de las 15:00 horas, Liam se asomó por la ventana, la abrió y escuetamente movió el brazo en señal de saludo.
Eso bastó para que las niñas, de entre 13 y 19 años de edad, soltaran en llanto y concluyeran que aquello era lo mejor que les
había pasado.
“Era él, está muy rojito pero era él”, aseguraban mientras sus padres trataban de tranquilizarlas ante la histeria que presentaron.
Los minutos pasaron y la euforia decaía a ratos, sin embargo, cerca de las 16:00 horas, de nueva cuenta la
locura se desató con Zayn, quien corrió un poco la cortina de su habitación para saludar brevemente a sus seguidoras que le contestaron con gritos ensordecedores.
De México para el mundo
El fenómeno que provocó One Direction en sus seguidoras provocó que en varias ocasiones parte de su staff saliera con cámara y micrófonos para captar la euforia de las mexicanas que se esmeraban en salir en las tomas gritando, aplaudiendo e incluso llorando.
Llamó la atención que mientras cientos de niñas se entregaban a la pasión de aclamar a sus ídolos, sus padres las esperaban y cuidaban desde atrás. Algunas mamás corrían con sus hijas tratando de encontrar el mejor lugar para ver mientras los papás las cargaban en hombros para que captaran los detalles de esta verbena.
A las 16:45 la banda salió del hotel aprovechando la distracción que habían generado las cámaras. A bordo de tres camionetas escoltadas por seis motociclistas de la Secretaría de Seguridad Pública, salieron del lugar.
