
WASHINGTON, 13 de septiembre.– Por primera vez en la historia de la humanidad una sonda espacial, la Voyager 1, ingresó al espacio interestelar tras unos 36 años de vuelo.
Esto fue afirmado por investigadores estadunidenses que trabajan junto a Donald Gurnett, de la Universidad de Iowa, en la revista especializada Science, en base a nuevas mediciones.
Ahora, como tenemos nuevos y decisivos datos, creemos que éste es el paso histórico de la humanidad en el espacio interestelar”, apuntó el científico de la NASA Edward Stone.
Previamente hubo reiteradas suposiciones en el sentido que la sonda había abandonado los confines del sistema solar, aunque la agencia espacial estadunidense NASA informó en un comunicado que desde la década de los 60, la mayoría de los científicos coincidieron en que el límite del sistema es la nube de Oort, ubicada a un año luz de la Tierra y a donde la Voyager 1 tardaría en llegar unos 300 años.
El equipo del Voyager necesitó tiempo para analizar e interpretar las nuevas observaciones, añadió Stone, quien no se encuentra entre los autores del nuevo estudio. “Pero ahora podemos respondernos la pregunta que todos nos formulamos: ‘¿Ya llegamos? Sí, esos somos nosotros’”.
La sonda fue lanzada el 5 de septiembre de 1977, y su melliza Voyager 2 unas dos semanas antes, el 20 de agosto. De acuerdo con la última evaluación de los datos, ingresó al espacio interestelar el 25 de agosto de 2012.
Visitó Júpiter y Saturno en 1979 y 1980, y envió las primeras imágenes detalladas de sus lunas y junto a la Voyager 2 tomó fotografías de los otros planetas.En 1990, Voyager sacó la primera foto completa del sistema solar.
Viaja a unos 60 mil kilómetros por hora a través del espacio y actualmente, a unos 19 mil millones de kilómetros, es el mensajero más distante de la humanidad. Debido a la gigantesca distancia, sus señales tardan más de 17 horas en llegar a la Tierra.
Por su parte, la algo más lenta Voyager 2 se encuentra a unos 15 mil millones de kilómetros de la Tierra y, debido a que fue lanzada primero, se convirtió en la sonda espacial con mayor tiempo en operación.
Momento decisivo
Astrónomos registraron cambios en los niveles de radiación el 25 de agosto, cuando bajaron los niveles de los rayos cósmicos del sol y subieron los de los rayos cósmicos galácticos fuera del sistema solar.
Los investigadores sospecharon en ese momento que el Voyager 1 se encontraba en el espacio interestelar. Pero recién los nuevos datos de mediciones en abril y octubre del año pasado permitieron ahora estos análisis decisivos.
Claramente traspasamos la heliopausa, la frontera estimada durante largo tiempo entre el plasma solar e interestelar”, señaló el autor principal del estudio, Gurnett. “Probablemente en agosto de 2012”.
Voyager 1 habría traspasado al espacio interestelar, a 18 mil millones de kilómetros del Sol, o sea, 121 veces la distancia entre la Tierra y dicho astro.
Este tan esperado momento histórico dio lugar a polémicas en los últimos meses. Dos estudios publicados este año y basados en otros datos, habían concluido que la sonda había llegado al espacio interestelar el año pasado, pero la NASA estimó que no eran concluyentes.
Se prevé que la sonda puede continuar enviando datos hasta 2025, pero luego se agotará su fuente de energía.
“Permitirá observar el espacio interestelar”
La llegada de la sonda espacial Voyager 1 a la frontera del sistema solar es un suceso que marca un hito tanto para la humanidad como para la ciencia que estudia el espacio exterior, afirmó Andrew Ingersoll, miembro de la misión científica que se encargó de estudiar el desplazamiento de la nave.
Esto significa que somos capaces de enviar naves espaciales más allá de nuestro sistema solar, así que mucho de esto es simbólico, ya que es la primera vez que hemos ido tan lejos”, aseguró Ingersoll.
En entrevista para Excélsior, el también profesor de ciencia planetaria en el Instituto de Tecnología de California consideró que la llegada de la sonda a la frontera del Sistema Solar también representa un logro científico que permitirá la observación del espacio interestelar “a pesar de que es casi un espacio con ausencia de elementos, pero no es realmente un vacío, así que podremos medir moléculas y observar cómo es”.
Ingersoll participó en la misión del Voyager 1 mientras recorría a Júpiter y Saturno, tiempo durante el cual se encargó de estudiar las atmósferas de ambos planetas a través de la información que las cámaras y otros instrumentos de la sonda recolectaron.
Cuando el Voyager 1 pasó Saturno y se encaminó hacia el espacio interestelar, de alguna forma dejé de trabajar directamente con la nave espacial, pero por otra parte siempre estuve muy al pendiente de observar que el Voyager 1 iba cada vez más y más lejos y me sorprende que haya alcanzado este punto antes de que la señal se agotara”.
El especialista explicó que inicialmente la sonda fue designada para llevar a cabo observaciones a los planetas del sistema solar, pero una vez que llevó a cabo su trabajo no hubo forma de bajar la velocidad que alcanzó gracias a tirones gravitacionales asistidos.
Una vez que la nave se dirigió al espacio interestelar todos dijeron: debemos usar esta oportunidad para ver cómo es ese espacio; a pesar de que sabemos que es sobre todo vacío, hay partículas que vienen de las estrellas y tenemos que ver qué hacen, después de todo esto podría explicar algunas interrogantes acerca de la formación de nuestro universo”, dijo.
Respecto al impacto de las mediciones e información que podría registrar el Voyager 1, el especialista opinó que es probable que no haga un gran cambio en el entendimiento del espacio “porque existen otro tipo de elementos para medir lo que hay en este punto”.
Agregó que en el momento en que escuchó la noticia acerca de la distancia alcanzada por la sonda no pudo evitar pensar en el astrofísico y divulgador científico que participó en el proyecto, Carl Sagan, debido a que siempre fue un entusiasta de los logros científicos y tecnológicos alcanzados por el humano.
Esto lo haría muy feliz, ver que hemos ido más allá del sistema solar y decir adiós al Sol incluso aunque estamos conscientes de que es una pequeña nave a la que se le agota la batería día a día”, finalizó.





