
LONDRES, 1 de diciembre - El Tottenham y el Manchester United igualaron a dos en Londres y la repartición de puntos no son de gran ayuda pues deja a ambos fuera de los puestos de Liga de Campeones hasta el momento.
Los "Spurs" llevaron la iniciativa en el encuentro y se adelantaron en dos ocasiones, por medio del inglés Kyle Walker y el brasileño Sandro Raniere, pero Wayne Rooney se encargó de equilibrar por dos veces el marcador, la segunda de ellas de penalti.
El Tottenham, que se llevó una estrepitosa goleada la jornada pasada contra el Manchester City por 6-0, nició la temporada buscando un lugar para regresa a disputar la Champions, pero corre el peligro de quedarse atorado en medio de la tabla. Este inestable momento que vive el equipo del norte de la capital inglesa mantiene a su director técnico, André Villas-Boas, en la cuerda floja.
El United, por su parte, parece haber recuperado terreno respecto al inicio del curso, uno de los peores de su historia reciente, pero necesitaba hoy una victoria para continuar con su intención de ocupar los primeros de la clasificación.
Después del primer cuarto de hora de partido, que se desarrollaba con una pareja disputa por el balón, el silbante marcó una falta de Evans sobre Paulinho al borde del área que Walker se encargó de convertir en un disparo que superó la barrera de los 'diablos rojos' y se coló por el centro de la meta del español David De Gea.
Los locales parecían dispuestos a tumbar el United en esos primeros minutos y pudieron marcar el 2-0 poco después con una volea de Michael Dawson que parecía dirigida a la red pero que chocó con Rooney sobre la línea.
Fue precisamente el internacional inglés quien equilibró el duelo pocos minutos después, a la media hora de juego, al hacerse con un balón en el interior del área tras un centro de Phil Jones que remató directo a gol.
Los locales salieron con energías renovadas en el segundo tiempo, y nada más empezar firmaron su segundo tanto con un disparo lejano de Sandro Raniere. El brasileño se hizo con el balón en la zona de medios, burló al inglés Tom Cleverley con dos recortes que le doblaron la cintura, y descerrajó un potente tiro que De Gea no esperaba. El balón se clavó en la escuadra derecha de la meta del español.
Tras el segundo del Tottenham, los dirigidos por David Moyes se volcaron al ataque de manera insistente durante cinco minutos llenos de constantes embates de los que sacaron un penalti a favor.
El árbitro consideró que el portero de los londinenses, Hugo Lloris, derribó en el área Danny Welbeck, que se filtraba por el sector izquierdo con el balón controlado, y Rooney plantó el balón en los once metros.
El inglés lanzó un tiro raso, al centro, que engañó a Lloris, que había apostado por un tiro hacia la izquierda y que recogió el balón del interior de su portería por segunda vez esta tarde.
El delantero mexicano, Javier ‘Chicharito’ Hernández, ingresó a la cancha en lo últimos 20 minutos de juego, en los que no tuvo oportunidades de peligro para buscar darle el triunfo al Manchester United que comienza a alejarse, cada vez más del líder Arsenal.
fdr

