
CIUDAD DE MÉXICO, 20 de julio.- El presidente Enrique Peña Nieto informó que durante su gobierno ha descendido la violencia generada por la delincuencia organizada.
En una entrevista que concedió al diario francés Le Figaro, explicó que “en siete meses hemos observado una bajada gradual de la violencia en el país, aunque todavía queda mucho camino por recorrer”.
Sobre la captura de ElZ-40, líder de Los Zetas, el mandatario expuso que “continuaremos luchando contra esos 140 criminales identificados”.
Al destacar que el problema que México padece es el de un “consumo creciente de droga” y de grupos criminales “ultrasofisticados”, Peña Nieto indicó que entre 2006 y 2012 se duplicó el número de cárteles.
“Hubo que lamentar la pérdida de más de setenta mil víctimas”, dijo.
70 mil víctimas de 2006 a 2012
La violencia descendió “gradualmente” en México en los siete primeros meses del gobierno del PRI, destacó en una entrevista con el diario francés Le Figaro el presidente Enrique Peña Nieto.
En siete meses hemos observado una bajada gradual de la violencia en el país, aunque todavía queda mucho camino por recorrer”, admitió Peña Nieto.
En la entrevista, publicada este viernes en toda la contraportada, el periódico destacó que “el nuevo jefe de Estado mexicano quiere luchar contra la violencia y el tráfico de drogas actuando contra los jefes de los cárteles, pero también contra la pobreza.
“Nuestra estrategia es clara: continuaremos luchando contra esos 140 criminales identificados, y de manera selectiva, pero el medio más eficaz para luchar contra la violencia es dar a los mexicanos una oportunidad para triunfar, devolverles la confianza en el futuro.”
El Presidente explicó que “el crecimiento (económico) de los últimos años no es suficiente. El resultado ha sido que numerosos mexicanos han caído en la ilegalidad, usados como carne de cañón por el crimen organizado. Ahí es donde hay que actuar”.
De la reciente detención del líder de Los Zetas, el mandatario estimó que “es una muy buena noticia”, pese a que “según algunos expertos (…) cuando un capo cae se le sustituye inmediatamente por otro, a veces por dos”.
Enrique Peña Nieto resaltó, en este sentido, que “entre 2006 y 2012 el número de cárteles se multiplicó por dos y hubo que lamentar la pérdida de más de setenta mil víctimas”.
Según el mexiquense, el problema que el país vive actualmente es el de “un consumo creciente de droga y de los grupos criminales ultrasofisticados.
“Éste es un problema que no existía antes, y de ahí nace la necesidad de modernizar nuestra política y nuestras técnicas para combatirlo”, precisó el Presidente al resaltar que el gobierno mexicano desea concentrarse sobre “la prevención” del crimen mediante diversos medios.
Entre ellos enumeró la mejora de la educación, la construcción de infraestructuras deportivas, el refuerzo de la comunicación entre el Estado federal y las entidades, el refuerzo de las instituciones y una reorganización de la Policía Federal y de la Secretaría de Gobernación.
El caso Cassez fue una lección
Le Figaro destacó que el Presidente mexicano, quien recibió el lunes al ministro francés de Asuntos Exteriores, Laurent Fabius, “quiere relanzar las relaciones diplomáticas con Francia, luego de años de tensión”, derivados del caso Florence Cassez.
El rotativo tituló la entrevista con un comentario de Peña Nieto: “el caso de Florence Cassez fue una lección al recordar a México que cualquier sospechoso tiene derecho a un juicio justo y al respeto de sus derechos fundamentales”.
Aludía así a los siete años que la francesa estuvo tras las rejas, hasta enero pasado, pues la justicia mexicana la condenó a 60 años por secuestro, entre otros delitos, al reconocer irregularidades.
El jefe del Estado mexicano indicó que, tras esa experiencia, se ha previsto poner en marcha de aquí a 2016 un sistema de justicia oral para los procesos penales, lo que constituye “un gran cambio para México y para los mexicanos, acostumbrados a una justicia escrita”.
En cualquier caso, precisó que eso se hará “gradualmente”, porque se necesita una policía de investigación “mejor formada” y “un sistema de pruebas más eficiente”.
Constató que el caso Florence Cassez —cuya defensa pública por el anterior presidente Nicolas Sarkozy provocó diferendos diplomáticos— “enfrió” las relaciones bilaterales, pero cree que han “pasado la página”.
Para ilustrarlo, aludió a la presencia en México el pasado 14 de julio, día de la Fiesta Nacional francesa, del ministro de Exteriores, Laurent Fabius, al que Peña Nieto recibió.
También aludió a la puesta en marcha de un grupo de cooperación franco-mexicano.
“Ha llegado la hora de relanzar la cooperación entre los dos países y de intensificar nuestra presencia en la escena internacional”, comentó.
Al preguntársele sobre las posibilidades de que las empresas francesas opten por contratos de grandes infraestructuras que ha anunciado su gobierno, el Presidente respondió que “México es un país muy atractivo en este momento, y sobre todo fértil para las empresas europeas que buscan un nuevo empuje”.
Y añadió que “Francia tiene cartas que jugar en el terreno industrial, ferroviario, aeroespacial”, y que con la próxima reforma financiera se va a favorecer la llegada de pymes extranjeras: “hay miles de oportunidades tanto para Francia como para los franceses”.
— Con información de EFE


