
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de agosto.- Los escándalos de corrupción que debilitan a los gobiernos de Italia y España crearon problemas para la recuperación económica pero obligaron también a insólitas alianzas políticas, aseguró la empresa de análisis Stratfor.
Las controversias se han desarrollado en un momento en que ambos países están luchando para salir de la recesión en Europa y están sujetas a altos niveles de desempleo”, advirtió para luego subrayar que hasta ahora, los gobiernos de los dos países han logrado sobrevivir.
De hecho, por ahora los gobiernos de los dos países permanecerán en el poder, pero “la pérdida de confianza de los votantes en los principales partidos políticos y las instituciones estatales seguirá obstaculizando los esfuerzos para reactivar el crecimiento económico”, precisó.
En España, porque el gobierno del primer ministro Mariano Rajoy tiene la mayoría en el Parlamento y eso le permite bloquear votos de censura y desoir llamados a elecciones anticipadas, consideró Stratfor,
En Italia es más complicado, añadió, toda vez que el Partido Pueblo de la Libertad del ex primer ministro Silvio Berlusconi es un componente clave de la coalición de gobierno pero el anciano industrial y político fue sentenciado esta semana a cuatro años de cárcel por fraude al fisco.
El régimen del primer ministro Enrico Letta se encuentra así en la alternativa de expulsar a Berlusconi y ver la disolución de su gobierno o de mantener a Berlusconi y enfrentarse con los militantes de su partido.
Berlusconi no ayudó a la tranquilidad de Letta al amenazar con el retiro de su apoyo parlamentario en caso de que se confirme la sentencia del Tribunal Supremo de Italia y por tanto su condena de cuatro años de prisión, de los que tres le fueron conmutados por una amnistía y el año restante puede ser cumplido en arresto domiciliario.
Además, ahora está en revisión una sentencia que inhabilita a Berlusconi para detentar cargos públicos por cinco años.
Pero al mismo tiempo, si los partidos de centro-izquierda que componen el resto del apoyo de Letta ceden a la jugada de fuerza de Berlusconi, “erosionarán el apoyo popular a los principales partidos de Italia”.
Stratfor observó que la crisis ha dado origen a insólitas alianzas en toda Europa, toda vez que el gobierno de Letta no sería posible sin el respaldo del partido centro-derechista de Berlusconi.
En España, el Partido Socialista Obrero no admite directamente al Partido Popular, pero su decisión de no empujar fuertemente a nuevas elecciones es sorprendente. Para las élites tradicionales de Italia y España, la colaboración renuente es la realidad política de una Europa en crisis”, concluyó.

