CIUDAD DE MÉXICO, 28 de abril.- Le había costado al Cruz Azul ser certero en sus tiros frente al arco, pese a jugar un mayor tiempo con el balón controlado. Tuvieron que pasar 35 minutos de juego para que Christian Giménez venciera al guardameta Oswaldo Sánchez y sellara el cuarto triunfo consecutivo de La Máquina en el torneo, frente a un Santos frágil en defensa y poco claro al ataque.
El Chaco había tenido dos mano a mano frente a la portería rival, pero falló en ambos. Apenas al minuto siete el argentino fue habilitado con un servicio de Teófilo Gutiérrez y, aún sin marca, estrelló la pelota en el cuerpo de Oswaldo. La misma escena apareció al 11’, en su segunda oportunidad, aunque su disparo mostró menor potencia.
Los laguneros intentaron responder cuando encontraron espacios. Hérculez Gómez se quedó cerca de marcar, pero su tiro pasó a centímetros de la portería celeste. Enseguida, Darwin Quintero fue asistido por Gerardo Lugo y decidió disparar desde larga distancia sin encontrar destino en la portería.
No obstante, la intensidad del cuadro celeste se mantuvo. Pablo Barrera, en nivel ascendente, tomó las tiendas desde la banda derecha para meter en problemas al zaguero Oswaldo Alanís y ser uno de los principales repartidores de servicios al área.
Al 33’, en una jugada organizada por Barrera, ni el Chaco ni el propio mediocampista pudieron enviar el balón a las redes en una serie de rebotes que dejó libre la portería visitante.
Aunque las fallas continuaron, La Máquina conservó la paciencia y recompensó su ímpetu con un cabezazo certero del Chaco, quien ahora sí venció a Oswaldo Sánchez.
Con la mínima ventaja el Cruz Azul se fue al descanso sin tener siquiera que retroceder frente a un equipo apaciguado. En la reanudación los celestes bajaron el ritmo y apostaron por un funcionamiento menos arriesgado.
Conscientes de ello, los de Torreón se despojaron de las ataduras y fueron a buscar la meta local. El ingreso de Mauro Cejas y Andrés Rentería le cambiaron la perspectiva al cuadro dirigido por el portugués Pedro Caixinha, y, con trazos largos y escapadas por las bandas, Santos se acercó con mayor frecuencia aunque, no fue fino en la definición.
Surgió entonces la mejor versión de Jesús Corona: el arquero celeste detuvo los remates de Rentería y recostó también cuando Cejas intentó hacer daño. En los minutos finales, Cruz Azul cerró líneas y defendió a toda costa el gol que, además de detener la racha de nueve partidos sin derrota de su rival, le acercó con mayor firmeza a la liguilla.







