
CIUDAD DE MÉXICO, 24 de marzo.- La docencia en el nivel preescolar es ofrecida como “la carrera del futuro”, se cursa en nueve meses y dos horas diarias de lunes a viernes.
De esta manera promueve una escuela en Iztapalapa la licenciatura, así como la opción técnica en asistente educativo. El plantel dice estar reconocido por la SEP, pero en realidad se trata de un centro educativo de los denominados patito.
Con folletos que reparten en el Metro de la Ciudad de México y en los alrededores del plantel buscan a los interesados diciendo que ahí ofrecen “la carrera del futuro”, cuando las cifras oficiales del Observatorio Laboral de la Secretaría del Trabajo clasifica a la docencia en preescolar como una de las profesiones con más egresados, quienes ganan en promedio siete mil 300 pesos al mes.
Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, en el segundo trimestre de 2012, 110 mil personas que estudiaron licenciatura en educación preescolar trabajaban en un empleo vinculado con su profesión y hasta el pasado viernes el Observatorio Laboral indicaba apenas 13 vacantes para maestro de preescolar, de las cuales ninguna rebasaba los cuatro mil 700 pesos de sueldo al mes.
Pero el truco publicitario del plantel lo lleva en el mismo nombre. Se dice llamar Cecat-Iztapalapa, que a simple vista es alusivo a los centros llamados Cecati, que pertenecen a la SEP y cuyas siglas corresponden a Centro de Capacitación para el Trabajo Industrial.
La propaganda busca atrapar a quienes están interesados en ser maestros de preescolar o asistentes educativos y ofrecen la “ventaja” de que pueden hacerlo en nueve meses.
El único requisito es pagar cada 30 días 800 pesos durante los nueve meses, con el fin de prepararlos para presentar un examen que aplica el Centro Nacional de Evaluación para la Educación Superior (Ceneval), que presentan quienes estudiaron esa licenciatura y aún no cuentan con el título, pero la SEP ofrece esa opción para que puedan obtener la cédula profesional.
El plantel presenta en su propaganda un logotipo de la SEP con colores amarillo y gris, los cuales identificaban al sexenio de Felipe Calderón, pero al buscar esa escuela en la página del Sistema de Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios, la institución no aparece en el registro ni tampoco es uno de los Cecati oficiales de la dependencia federal.
El secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet, ha dicho al respecto, que escuelas como ésa engañan a jóvenes que no tuvieron acceso a una institución pública y no cuentan con los recursos económicos pero buscan opciones de planteles particulares con cuotas a su alcance.
Apenas el pasado 20 de marzo, el titular de la SEP advirtió que las escuelas privadas serán verificadas cada año, porque un estudiante no es un cliente al que se le puede ofrecer una educación de mala calidad.
Los planteles patito, dijo, “son un cáncer, por lo que tenemos que establecer junto con las universidades condiciones de evaluación que permitan que las escuelas no sean un negocio y no estén sujetas a leyes mercantiles, sino de eficiencia educativa”, subrayó.
“Los Revoes, que son los Reconocimientos de Validez Oficial, dejarán de ser eternos para volverse anuales, y todas las escuelas de México que estén en el tramo de la educación obligatoria tendrán que pasar a ser objeto de revisión y evaluación como cualquier otra escuela pública”, aseveró.
El secretario admitió que es urgente acabar con ese tipo de planteles, porque “sí hay escuelas patito, escuelas que no cumplen con sus obligaciones y que tendrán que someterse a criterios de evaluación que el INEE establezca”, dijo el pasado 11 de enero en el Foro México 2013, organizado por la OCDE.
Un estudio de la misma SEP revela que, durante los últimos seis años, siete mil 84 programas de estudio no han cumplido con los requisitos de calidad; cifra que representa 45.6% de las opciones de estudio autorizadas por la misma dependencia.
Ese diagnóstico detalla que, en la pasada administración, la SEP recibió más de 11 mil 600 solicitudes para impartir programas educativos de educación superior y autorizaron ocho mil 592.


